Una óptica motivada en una tarde de valores y arte.

¿Por qué no basta a los minúsculos pensamientos del criollismo conservador todo lo que está pasando en el país para pedir un “Basta Ya”? ¿Es que acaso dentro de su conservadurismo y terquedad no avizoran el camino que lleva el pueblo?

Si bien es cierto la historia se escribe como la vida en el segundo que se vive, hay señales claras de si todo esto está concebido para: Limpiar, hacer profilaxis, así se va escribiendo la historia, se les puede decir en este momento: Que se les fue la mano con los disparos y se les está yendo de las manos, la historia que ustedes, equivocadamente por supuesto, quieren escribir. La historia es indetenible como el tiempo que pasa y sigue.
De ninguna manera lo siniestro de estos hechos puede justificarse.
Justificar lo injustificable es sólo cavarse a sí mismos.

Asumamos que el Presidente Manuel Zelaya, sea tan corrupto como los ex presidentes Callejas y Maduro; tan estafador como Miguel Facusse que no pagó la cuenta de CONADI y cientos más; como los árabes radicados por aquí que están exonerados de impuestos y tienen ventajas sobre el 70% más pobre del país.

Asumamos todo eso y veamos, vean que, con lo que pasa en el país, sólo están dando muestras de su tontedad, están enfermos de imbecilidad...Esto no es insultante, es que la imbecilidad, es una enfermedad psiquiatrita y la padecen los poderosos irreflexivos que no miden las consecuencias de sus hechos y palabras.

Ojo.... Recuérdese que este país es de todos y todas las personas que aquí nacimos. No somos burros ni burras transformados en humanos, como las antiguas leyendas africanas: Repiensen.... ¡Si pueden!, si no, pidan ayuda a personas inteligentes, pero no a Reich que los lleva al abismo, ni a Billy Joya cuya área es la muerte...

Vean lo que están convocando. Están matando pueblo, las balas no son de salva y aunque lo fueran son balas. Se enfrentan a un pueblo que parece débil, se les olvida que los tiempos cambian, que el hambre aprieta, que la represión molesta. Se les olvida la violencia que ustedes mismos han engendrado. Hay siempre una cuenta reversiva. Lo que no es irreversible es la historia.

No justifiquen con la corrupción, en caso de asumirlo ya, de un presidente, la represión de un pueblo.

Condenen esa Corte de Injusticia, “Donde se está en espera de alguien que nunca llega”, dice Roberto Sosa.

Aunque ya una gran parte de la población condenó a los expresidentes corruptos; a los continuistas del congreso nacional, a los títeres de esta oligarquía mediocre y temerosa, que tras las armas y la represión asesina al pueblo.

No justifiquen estos hechos por la corrupción, tras la cuarta urna o por supuestos intervencionismos extranjeros que les lleva a cometer las más grandes estupideces nunca antes vistas. Aunque saquen prensa del territorio nacional se ven en gigantescos espejos en todo el mundo.

Honduras, ¿Quien lo diría? América, cintura angostura, centro de Centroamérica, centro del mundo, donde el mundo se pregunta todos los días en sus canales de Televisión y en los cables internacionales… ¿Será cierto que golpearon embajadores? SÍííííííííí y luego la palabrota... ¿Será cierto que sacaron a los periodistas de televisión internacional? Sííííiííí y luego otra palabrota... ¿Será cierto que cerraron unos días todas las emisoras que transmitían los sucesos sobre esta sucesión? .... perdón sobre este Golpe de Estado.... SÍííííííííí

¿Será cierto que le dijeron al presidente de Estados Unidos “Negrito del Batey”... y que quien lo dijo, fue el canciller nombrado por ese gobierno? y se siguen respondiendo... SÍííííííííí

Todo es cierto señores, señoras, estamos en la posibilidad de informar... dice el mundo; que hace cientos de años.... no mirábamos nada igual, esto ocurre... bien clavadito el nombre, en un país que se llama “Honduras”. Y todo el mundo lo sabe y todo el mundo aunque no lo crean, está atento del día a día que ocurre en este lugar donde la hondura del amor del `pueblo ahoga a sus represores en el propio abismo que están cavando con violencia.

Iris Mencía.
Desde una tarde donde la comunidad artística compartió sus talentos y valores y descorre un poquitito el telón de la historia.